Si te acabas de comprar un frigorífico, ¡no te puedes perder nuestros tips de puesta en marcha!

Si acabas de comprarte un frigorífico, no te puedes perder nuestro artículo de hoy. En nuestro blog te contamos todo lo que tienes que saber tras la recepción de tu nueva nevera para poder sacarle el máximo partido desde el primer momento y, ¡no llevarte ningún susto!

Antes de nada, ¿ya has elegido la ubicación del nuevo miembro de la familia?

Seguramente sí, pero por si las moscas, te dejamos algunos tips a tener en cuenta:

• Siempre debe estar alejado de las zonas calurosas de tu hogar como, por ejemplo, los fogones o la placa de inducción, así como de las ventanas. Recordemos que a mayor temperatura de la estancia más tendrá que trabajar la nevera para mantener la temperatura deseada y, consecuentemente, mayor desgaste de la máquina.
• Debe ubicarse sobre suelo firme, nunca encima de plataformas o desniveles.
• Asegúrate de que tenga suficiente ventilación, dado que es un factor clave para que el frigorífico pueda proporcionar corrientes de aire fresco y congelado a su interior. Para ello, deberá cumplir con las distancias recomendadas por el fabricante respecto la pared, así como por los lados y por su parte superior. En caso de no cumplir con dicho margen para que el electrodoméstico pueda ventilarse, el aire caliente puede llegar a acumularse y a afectar negativamente a su eficiencia.
• Y, por último, dado que es un electrodoméstico muy grande, lo más recomendable, para evitar que haga sombras, es colocarlo en los extremos de la cocina.

Dicho esto, pasamos a repasar los pasos a seguir para poder disfrutar de vuestra nueva nevera lo antes posible:

¿Cuándo puedo encender mi nevera nueva?

Si tu frigorífico te acaba de llegar, olvídate de enchufarlo. La razón principal es que una nevera lleva dentro de si diversos gases y líquidos, responsables de que pueda enfriar, y en el trayecto de la tienda a tu hogar, han estado en movimiento. Consecuentemente, es mejor dejarlos reposar un rato para que se estabilicen.

Recomendación: unas 3 horas.

Aprovecha la espera, ¡para poner a punto tu frigorífico!

La limpieza de nuestra nevera debe hacerse cuando aún está apagada, para evitar cualquier problema. Aunque esté sin estrenar, antes de introducir nuestros alimentos siempre será mejor darle un buen repaso.

Para facilitar la limpieza, te recomendamos quitar todas aquellas partes desmontables como las baldas. A continuación, moja un paño en agua y jabón neutro, de esta forma eliminaremos toda aquella suciedad superficial. El siguiente paso sería la desinfección y eliminación de microorganismos. Para ello podemos optar por hacer uso de productos químicos específicos o por una solución casera como es el vinagre, el limón o el bicarbonato, que gracias a su acidez son un desinfectante natural.

Después tocará dejar la puerta abierta de tu electrodoméstico para que se vaya la humedad. En caso de querer reducir tiempos, puedes secar su interior con un papel de cocina.

Por último, y no menos importante, ¡la parte exterior! Justamente es la que deberíamos limpiar más a menudo y, en especial, las asas de apertura.

¿Cuál es la temperatura ideal de la nevera una vez enchufada?

Nuestra recomendación es a 4ºC el frigorífico y a -18ºC el congelador. Asimismo, dado que la temperatura exterior influye directamente en la capacidad de enfriamiento de nuestra nevera, los nuevos modelos, como los de Midea, cuentan con sistemas integrados de regulación de la temperatura, con lo que el propio electrodoméstico se reajusta solo.

¿Cuánto tiempo debo esperar para introducir los alimentos?

Una vez enchufado tu frigorífico, es recomendable dejar que se estabilice durante una noche entera o 6 horas, antes de almacenar tus alimentos. El tiempo necesario para que la nevera llegue a la temperatura de enfriamiento idónea dependerá de:

• Tipo de frigorífico: combi, dos puertas, americano…
• De la temperatura de la cocina: cuanto más calor haga en la estancia más tardará en enfriarse. Antes de ubicar tu nuevo electrodoméstico es importante tener presente que, si lo pones en una habitación muy calurosa, puede estropearse antes de tiempo.
• No abrir las puertas durante este proceso para que sea más rápido.

Dicho esto, ¡a disfrutar de tu nueva nevera!